La Universidad de Concepción comenzó su proceso de acreditación con anticipación. En la presente etapa de autoevaluación, que se inició en enero de este año, se realiza el levantamiento de información a través de la consulta a quienes conforman la comunidad universitaria. 

 

Con el proceso de acreditación de la Universidad de Concepción fechado para 2023, la institución inició sus procesos internos con dos años de anticipación. Actualmente, la Dirección de Desarrollo Estratégico trabaja en la etapa de autoevaluación institucional, en la que se consultó a distintos estamentos de la comunidad por su opinión en distintos temas de relevancia.  «Cuando una institución realiza un proceso de autoevaluación institucional, en miras a la acreditación, tiene que levantar información objetiva y opinión”, explica Luis González Bravo, jefe de la Unidad de Estudios Estratégicos. “En nuestro caso, consultamos a seis estamentos de la comunidad: personal académico, personal de servicios y administrativos, directivos, estudiantes, egresados y empleadores”, explica.  

Las instituciones, explica González, tienen bastante libertad con respecto a las metodologías para los estudios. “Nosotros realizamos estudios masivos, aplicamos encuestas online en todos estos estamentos, logramos buenas tasas de respuesta en todos ellos. Estamos muy contentos de la participación que hubo y de los resultados también”.  

Resultados del estudio de Percepción de Académicos y Académicas: 

Destaca la buena evaluación de los servicios a los estudiantes: «en general, la experiencia de la vida universitaria, la convivencia, los sistemas de apoyo, en todos los estamentos está bien evaluada”, afirma González. Otro de los puntos con buena evaluación fue el Plan Estratégico: «eso nos muestra un Plan Estratégico que es conocido, que es difundido. Eso es interesante porque la Universidad de Concepción ya tiene varios ciclos de planificación estratégica. Entonces, básicamente, es una metodología ya completamente instalada en la universidad”, explica.  

“En el caso de las respuestas cualitativas, nuevamente nos encontramos con aspectos y fortalezas que aparecen en otros estudios, como es el caso de la vinculación con la comunidad y el prestigio de la Universidad de Concepción: hay un capital muy potente que nos tiene que llenar de orgullo como institución. La relación que tenemos con la comunidad”. En medio de la discusión del rol público de las universidades no estatales, el reconocimiento que tiene la comunidad hacia la Universidad de Concepción acerca del rol de la institución “está confirmado en nuestro hallazgo. El nivel de inserción que tenemos en las comunidades, en los tres campus, es muy potente. Sin duda es un compromiso que está fuera de discusión”, agrega.  

¿Cuál es la opinión del personal administrativo y de servicios? 

“Si bien hay una aprobación con respecto a la exigencia y dedicación, en términos totales hay diferencias por campus. Es un aspecto que podemos mejorar”. Para Luis González, el desafío de mejorar la calidad en términos de infraestructura y recursos humanos para atender las distintas necesidades en todas las áreas es habitual en las Instituciones de excelencia. “Siempre vamos a estar motivados a mejorar las condiciones en las cuales desarrollamos nuestras actividades. Eso no es un problema en sí mismo. Creo que una universidad que crece y se desarrolla permanentemente siempre se va a responder a necesidades y demandas crecientes y emergentes”. 

La gestión de la Universidad es bien valorada por el personal, mostrando que sirve a los propósitos institucionales y a los requerimientos del medio. Demuestra el desarrollo de una cultura respetuosa. “Nosotros tenemos una acreditación de 7 años, aspiramos nuevamente a una acreditación de excelencia, tenemos un entorno que exige en las instituciones mantener y aumentar los estándares de calidad permanentemente. Los sistemas de soporte tienen que ir evolucionando para poder mantener esos estándares de calidad”, explica.